martes, septiembre 16, 2008

Cuando oramos...¿nos escucha Dios?_Escribe: Gustavo Bazo

La forma de orar, como casi todas las acciones que realizamos para vincularnos con Dios, lamentablemente, aun forman parte de la vieja conciencia de separaciòn.

En el evangelio, Jesùs, solo pronuncia una oraciòn: el Padre Nuestro. Una oraciòn de unidad con el Padre.

Si creemos realmente que cada uno de nosotros es templo vivo del espiritu santo, del mismisimo espiritu de Dios, orar, en realidad, debe ser un re-encuentro con nuestra propia divinidad, una intima conversaciòn con nuestro propio ser esencial, sustancia misma del Padre Creador: ¡...Hagase, Señor, tu voluntad...! (Jesùs Hubert)

Recuerdo que durante el terremoto acaecido en Lima en Octubre de 1966, Sor Marìa nos detuvo dentro del salòn de clases exhortàndonos a rezar para que el movimiento sìsmico se detuviera. Tenìa sòlo 9 años, y no entendìa claramente por què habìa tanta contradicciòn entre la practica y el contexto en el cual se manejaba la religiòn.

"Dios mediante", !gracias a dios!, "si dios quiere", "la voluntad de dios", etc., eran frases que se vertian constantemente en aquel ambiente agustino de los sesenta (al parecer, no se ha perdido la costumbre). La pregunta era: por què la querida Sor Marìa nos pidiò rezar aquella tarde, si claramente (segùn el dogma) el movimiento sìsmico era la "voluntad de dios". Èsta, y muchas cosas màs, nunca lograron cuadrar en la compleja y contradictoria estructura que la religiòn nos mostraba.

Finalmente, años màs tarde cuando fui expulsado de aquèl colegio, aùn no estaban claros algunos puntos que con el pasar del tiempo conseguì descifrar.

Lo claro es que desde niños somos inculcados con ciertos paràmetros que luego nos son difìciles de abandonar. El rezar es uno de ellos; sin embargo, es obvio que no somos concientes de lo que hacemos cuando lo hacemos. Què sucede con una persona devota que coge su rosario y comienza tenazmente a rezar sin detenerse. Pues, està siendo contradictoria con su credo: primero se apoya en la voluntad de dios, y, luego, reza para que esa voluntad cambie. De estos casos hay muchos ...y al parecer se cree que cuanto màs se rece las posibilidades de conseguir la gracia seràn mayores.

Es poco probable que exista un Dios que actue de esta manera, es decir: repartiendo gracias en respuesta a las oraciones o suplicas vertidas.

Pero, ¿por què rezamos, o pedimos? Sòlo se pide lo que se "cree" no tener. De manera que cada vez que elevamos nuestras plegarias al cielo, sòlo estamos remarcando en nosotros mismos la idea de que carecemos de algo: amor, paz, abundancia, salud, armonìa, etc.

Ahora bien, en algunas oportunidades nuestros rezos o pedidos son respondidos, otras no. Eso implicarìa que hay un Dios que determina mediante un juicio quièn es merecedor de la gracia y quien no lo es. ¿Pero, por què darle razgos humanos a Dios, y negar los divinos en nosotros? Tal vez, el revertir alguna circunstancia o episodio de nuestra vida estè en nuestra propias manos, y no en algo externo como nos han hecho creer.

Definitivamente, hay personas que no les agrada leer este tipo de cosas, pues desestabiliza de alguna manera lo que son sus cimientos. Pero, hay que hacer incapiè en que nadie està tratando de que dejen de hacer lo que hacen, o de creer lo que creen. En todo caso, sòlo de comprender lo primero, y cuestionar lo segundo.

A veces, llega un momento en nuestras vidas en donde se nos presenta la oportunidad de mirarnos a nosotros mismos, comenzar a caminar y observar nuestros propios pasos, para asì dejar de mirar al cielo...tal vez asì encontremos el camino hacia èl.

16 - 09 - 08

Ave Maria_Canta:Sarah Brightman

El saludo-homenaje del Arcángel Gabriel a Maria, en ese momento futura Madre de Jesùs, por encargo del mismo Dios creador, es una de las oraciones mas bellas y conmovedoras que se hayan pronunciado nunca. Y lo es, porque no solamente se refiere a un ser humano en particular, sino a la condiciòn misma de Madre de toda mujer, co-creadora con el Padre, de nuevos hijos de Dios.

El genial mùsico vienes Franz Schubert, quien se transportaba con todo su ser a la fuente misma de la creaciòn cuando traia a luz nuevas composiciones , fue el vehiculo elegido para que nos llegara su inmortal "Ave Marìa", melodia cuya sola vibraciòn despeja cualquier sombra del cuerpo y/o del alma.

Ese caracter del "Ave Marìa", como un homenaje supremo a la mujer-madre, se expresa maravillosamente desde las cumbres vocales de la inglesa Sarah Brightman y, particularmente, a travès de este màgico video-clip, que nos complacemos en compartir, con caracter terapeutico-espiritual, con cada uno de ustedes. (Jesùs Hubert)



Ave Maria
Gratia plena
Maria, gratia plena
Maria, gratia plena
Ave, ave dominus
Dominus tecum
Benedicta tu in mulieribus
Et benedictus
Et benedictus fructus ventris
Ventris tui, Jesus
Ave Maria, gratia plena